Blockchain: ejemplo fácil y práctico para entender cómo funciona

¿Qué es Blockchain?

Si has oído hablar de blockchain, seguramente haya sido relacionado con temas de criptomonedas, aunque la “cadena de bloques” no solo se usa para eso, sino para cualquier tipo de empresa que quiera aplicarla a sus transacciones.

De hecho, Blockchain es un tipo de DLT y nos ofrece una solución de descentralización de los datos, trazabilidad completa e inmutabilidad de la información contenida en cada bloque.

El objetivo de esta tecnología es generar confianza entre partes desconocidas, y, por consiguiente, transparencia y seguridad en las transacciones.

Si quieres conocer más en detalle la cadena de bloques, te recomendamos que leas nuestro artículo sobre qué es Blockchain y 5 razones para usarlo.

Casos de uso de Blockchain

Podemos suponer algunas aplicaciones reales de la tecnología blockchain para empresas, como es el caso, desde luego, de las transacciones financieras de todo tipo.

Pero, es posible aplicar la cadena de bloques también a cualquier solución logística en la que existan datos que no queremos compartir con todas las partes del proceso. Además tiene una utilidad muy interesante en un contexto electoral, puesto que los votos serían totalmente seguros, inmutables y anónimos. Y, en estos tiempos tristes de pandemia, es importante destacar la relación que se ha planteado entre blockchain y COVID-19.

En fin, ya que a veces la aplicación real de esta tecnología puede resultar difícil de entender, hoy vamos a compartir contigo un ejemplo práctico de blockchain en empresas del sector alimentario.

Ejemplo fácil de Blockchain para ver cómo funciona

Hablemos por un momento de “tomates”. 

A día de hoy conseguir tomates con el mejor sabor, la mejor calidad, y la mayor frescura no es tarea fácil. De hecho es muy común encontrarse con variedades de productos pensadas para tener una alta producción y que sean duraderos. También es cierto que podemos elegir tomates “mejores” pero a un precio considerablemente más elevado. A este respecto: ¿qué garantía real tiene el consumidor final sobre la mayor calidad de este producto? y ¿qué tiene que ver la frescura de los tomates con la tecnología blockchain? 

El caso real de aplicación de blockchain que os proponemos empieza en los cultivos de tomates de Almería, es decir, en su lugar de producción, y terminará en un supermercado de Madrid, distribuidor y lugar de adquisición final.

Empezaremos definiendo los participantes de esta transacción para después definir cuáles serán los activos a intercambiar en la misma.Y, por último, vamos a definir la transacción que quedará registrada en nuestra blockchain.

Participantes

Los participantes de esta transacción serían todas las partes interesadas en tener el tomate con el mejor sabor, y esto va desde el productor al cliente, pasando por diferentes entidades auditoras, hasta los dispositivos de control de temperatura durante el transporte.

Siendo tan diversos estos participantes, no todos necesitan cada información que guardamos en nuestra cadena de bloques, por lo tanto habrá participantes que sólo conozcan una parte de esta, mientras que, por ejemplo, el productor y el distribuidor final conocerán toda la cadena.

Los participantes serían los siguientes:

• Productor de tomates
• Empresa de transporte
• Entidad financiera
• Dispositivo de control de temperatura y humedad
• Entidad auditora
• Entidad certificadora de D.O.
• Distribuidor 

Activos

Definiremos los activos de la transacción como todos los datos que guardaremos en nuestra blockchain: desde un certificado de denominación de origen, un registro del tiempo de maduración, hasta un historial de temperatura y humedad durante el transporte.

Contaremos con los siguientes activos:

• Certificado de denominación de origen
• Certificado de maduración óptima
• Histórico de temperatura y humedad

Transacciones

Ahora sólo falta decretar unas normas que deben cumplir todos los participantes y que determinarán qué operación puede realizar cada uno de ellos y qué parte de información conocerán en detalle.

En este caso las transacciones podrían ser las siguientes:

• Certificación de calidad del productor
• Notificación de recogida para transporte
• Histórico de temperatura y humedad
• Certificación de denominación de origen
• Certificación de calidad de la entidad auditora
• Notificación de compra del producto

Smart contract y su funcionamiento 

Una vez conocemos los participantes, los activos y las transacciones, pasamos a desglosar todas las operaciones que realizaría el smart contract o contrato inteligente, o sea, el acuerdo inmutable almacenado y ejecutado en la blockchain, y, a través de un gráfico, explicaremos para quíen será visible cada «bloque» de información. 

1  –  Despliegue del smart contract y solicitud del pago al distribuidor: en este paso el productor de nuestros tomates de Almería despliega en la blockchain el contrato sobre el que vamos a operar. En esta operación únicamente solicita el pago.

2  –  Controles de calidad: marcados por el productor, en cuanto a tiempo de recogida, maduración, semillas utilizadas, es decir todo lo referente al producto iría almacenado en este bloque.

3  –  Auditoría de calidad: en este paso la entidad auditora comprobará que el producto cumpla con las normas y lo almacenará en un certificado en el siguiente bloque averiguando que todo lo almacenado en el bloque anterior concuerda con los datos recogidos por ellos.

4  –  La empresa de transporte: marca el pedido como recogido y verifica que el empaquetado es correcto para su transporte y lo certifica en el siguiente bloque de la cadena.

5  –  Control de temperatura y humedad: un dispositivo conectado a Internet está programado para monitorizar a partir de este punto, por lo tanto en todos los bloques sucesivos enviará los datos para que sean almacenados. Si el transporte fuese largo este nodo se vería replicado tantas veces como sea necesario para almacenar el control constante de los factores de calidad.

6  –  Entrega del producto: en este paso la empresa de transporte marca como entregado el cargamento en Madrid.

7  –  Certificado de D.O. : a continuación la entidad certificadora de denominación de origen, en la recepción del cargamento validará que se hayan cumplido todos los requisitos para otorgar el certificado.

8  –  Por último, el distribuidor: nuestro supermercado en Madrid realiza el pago solicitado por el productor y lo marca en la blockchain. En este bloque acaba la comunicación con el smart contract y se realiza el pago.

En la imagen se muestra la cadena de bloques generada por el smart contract. A la izquierda están los participantes y, a la derecha de cada uno, la copia de la cadena que tendría dicho participante. En verde estarían marcados los bloques que puede ver cada participante y en gris los que no. Los números indicarían que transacción se está realizando en cada momento.

Blockchain para empresas

Como está marcado en el gráfico, no todas las entidades tienen acceso a todas las transacciones, sino a las partes que le interesan. Por otro lado, tanto el distribuidor final como el productor tendrán toda la cadena disponible para comprobar anomalías dentro del proceso. Por ejemplo, la entidad financiera solo tendría acceso a los nodos relativos al pago, es decir el primero y el último, de igual forma que la empresa de transporte solo podrá ver los nodos intermedios que son relativos a su función. 

En fin, no se necesita que los participantes confíen entre ellos ya que la información sería descentralizada, trazable y segura. Esto significa blockchain.

Una vez visto el ejemplo práctico, es mucho más sencillo imaginar todas las enormes ventajas que la tecnología blockchain puede aportar a empresas de cualquier sector. Mucho más que sólo criptomonedas.

Somos expertos en soluciones Blockchain

En Tribalyte Technologies disponemos de un equipo de expertos en Blockchain y de ingenieros en I+D+i dedicados al desarrollo de aplicaciones descentralizadas (DApps) sobre Blockchain. Implementamos todo tipo de solución con la cadena de bloques. Además, somos socios de la Red Alastria.

El blockchain va a ser uno de los protagonistas de la recuperación económica y de la adaptación de las empresas a la «nueva normalidad», así que, si no quieres que te coja por sorpresa